lunes, 31 de diciembre de 2012

Exceso de limón

Si la vida te da limones, querida, en rodajas y con sal van muy bien con el tequila.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Evolution

Duele sentarse y darse cuenta de lo mucho que has cambiado. Recordar cómo eras, lo que querías ser. Y cómo te juraste no cambiar, defender tus ideales hasta la muerte.Ya no es igual.
Hace casi cinco años yo no era como soy ahora. He crecido mucho, quizás demasiado desde entonces.
Me prometí tener siempre los mismos gustos, las mismas convicciones, los mismos objetivos, y pasase lo que pasase no dejar que nada ni nadie me cambiase. Pero aquellas convicciones casi me hacen inmolarme.
Cinco años después, no sólo soy más alta y tengo el pelo más alto. Mis gustos han cambiado casi en todo. Mis metas no son las mismas. Sigo defendiendo mis ideales con fuerza, y todos los años sigo prometiéndome que seguiré así. Sólo que ahora asumo que para seguir siendo como soy, tendré que cambiar alguna vez. Adaptación evolutiva, creo que lo llaman.

martes, 4 de diciembre de 2012

Cuenta atrás

Llevo desde este fin de semana haciendo desde Twitter la cuenta atrás para ese "fin del mundo" que pronosticaron los mayas hace siglos. Todo esto tiene una justificación.
No es que yo crea en la profecía, que tampoco os lo diré. Es que tengo una teoría, que quiero poner en práctica, y ya me diréis si funciona.
Creo que si la gente cree que el mundo se acaba, que es cierto que tiene los días contados, disfrutará más de cada minuto, vivirá cada segundo como si realmente fuera el último, crea en profecías o no. No perderá el tiempo dudando, actuará sin pensarlo y aprovechará realmente su vida, sin preocupaciones. Es por eso por lo cual os cuento los días que quedan para que veamos si es cierto que ha llegado el apocalipsis, un cambio global o simplemente otro simulacro de Armageddon. Ante la duda, yo prefiero ponerme en lo peor. Si, en unos días se acabará mi vida aunque yo quiera, y tampoco podré evitarlo. Y que sepáis que pienso hacerlo con las botas puestas, con una cerveza en los labios y recordando cada instante que he usado en despedirme de este mundo.
Así que vosotros sabréis si queréis creer, aprovechar para disfrutar, y aliviaros por poder ver otro amanecer; o simplemente no creer, no vivir cada instante y pedir en el último momento una prórroga para despediros de la vida.
¿Cuántos días quedan entonces para el fin del mundo?

domingo, 2 de diciembre de 2012

Diciembre

Un mes frío de cojones. El último mes del año. Mes de promesas, mes de locuras, mes de ilusiones, recuerdos, aventuras, de lágrimas que se enfrían e instantes que te congelan. Y además, según la profecía maya, el último de nuestras vidas.
¿Seré capaz de hacer todo lo que quiero hacer antes de que llegue ese temido día?
21 de diciembre, no te tengo miedo.