martes, 14 de octubre de 2014

Súbete, McFly

Imagina ese instante, McFly.
En el que te robo el asiento
y me voy volando hacia atrás
a ese día y hora, a ese beso.

¿Qué habría pasado, Marty,
si no me hubiera lanzado
de cabeza y sin red, si no
me hubiera enamorado?

Me fugaría a otro pasado
en el que el "nosotros" nunca existió.
Pero así, McFly, no habría sido
lo que fuimos él y yo.

Así que dile a Doc que aparque el DeLorean.
Que para viajar al futuro no hacen falta trampas.
Necesitas ganas de tomar el rumbo
y una voluntad a prueba de balas.