martes, 27 de noviembre de 2012

¿Quién escribe la historia?


¿Te acordarás de mi por mis palabras el día que yo falte? No.
Te acordarás de mi por lo que digan los demás. Seré aquella chica que hizo qué, que dijo qué, que escribió qué. Y así hasta que la gente me deje perderme en el olvido. Seréis vosotros quienes, con anécdotas y palabras, alargaréis mi existencia todo lo que queráis. Después, me olvidaréis sin más. Habrá otra gente de la que hablar, otra vida que comentar, otra historia que tejer.
Mi historia no la escribiré yo, la escribiréis vosotros. Yo no soy sino quien vive prestada mi vida, que realmente es vuestra. Y viviré todo lo que vosotros queráis. Hasta que elijáis matarme, o simplemente, olvidarme.

martes, 6 de noviembre de 2012

Te quería (ej. 1)

Ayer estuve revisando mi cuaderno, ese que llevo cerca de un año llenando de mis pensamientos, versos y paranoias, y me di cuenta de que, por influencias varias en mi vida, llevo varios meses sin escribir sobre el desamor, que es una de los temas poéticos más fructíferos si cabe. Con esto, me planteé un ejercicio de inspiración y decidí intentar escribir algo sobre ese tema. Juzgad vosotros :)




Te quería.
Nos juramos tantas cosas
a la sombra de los sauces.
Adornaste todos mis planes
con un sinfín de síes
y otros tantos "para siempre".
Me besabas y decías que me quieres.
Te quería.
Y ahora aquí estoy. Sola.
Con mis planes y tus síes,
con tus besos y mi sauce,
y aquello que me juraste 
se lo está llevando el viento.
Y te quería. Y todavía te quiero. 


sábado, 3 de noviembre de 2012

Explosión

Atardece entre los tejados. La ciudad empieza a recogerse. Las tiendas cierran, cada ciudadano vuelve lentamente a su casa. Empieza a hacer frío. Me asomo a la ventana y veo como el sol, imitando a todas las personas, se empieza a marchar a su casa. Y es entonces cuando comienza el espectáculo. Un cielo multicolor, que arde como si La Tierra se hubiese acercado demasiado al Sol. Llamaradas naranjas salen del horizonte, tiñendo con su resplandor las nubes de tormenta y volviéndolas de gris a púrpura.
No sé si lo habéis notado, pero tengo una predilección inusual por las puestas de sol últimamente. Y mi cámara la comparte.