Si tú nunca te fueras de mi lado
el mundo en otro ritmo latiría,
al son de cada beso que me has dado
van pasando cada noche y cada día.
Si tú nunca te fueras de mi cama,
templo de la piel y las caricias,
mi cuerpo se convierte en una llama
y tu boca la mayor de las delicias.
Si tú nunca te fueras de mi almohada
mis sueños se harían realidad.
Siempre veo en ellos tu mirada
aunque los tenga a mi lado de verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario